Muchos cachorros parecen tener más caspa o una piel completamente seca y escamosa de lo que cabría esperar.

Esto es bastante normal en los cachorros y también se nota especialmente en aquellos con pelaje oscuro. Esto se debe simplemente a que la caspa llega a ser bastante visible frente al pelo oscuro. En la mayoría de los cachorros jóvenes, especialmente en los que tienen menos de cuatro meses, las glándulas lubricantes normales (glándulas sudoríparas) de la piel tienden a ser poco activas. A medida que estas glándulas maduran, su producción de lubricación aumenta para adaptarse a las demandas de la capa.

Aspectos como el aire seco (poca humedad) contribuyen igualmente a la fabricación de caspa. La caspa es piel seca y muerta que, en caso de falta de humedad, se desprende y es visible en forma de escamas blancas. Esta «descamación» también puede ser rasposa.

¿Cuáles son los síntomas de la caspa en los cachorros?

Los únicos síntomas son las escamas blancas de la piel, más visibles en el cuello, la espalda y la grupa. El proceso de descamación puede provocar un picor moderado, igual que el que experimentan los humanos con la piel seca y medio agrietada.

¿Cuáles son los peligros de la caspa en los cachorros?

No hay ningún peligro real, aparte de la pérdida de pelo. Esto, sin embargo, es poco común. La descamación grave o la pérdida de pelo no deben considerarse una producción regular de caspa y es necesario realizar un examen de la piel. Si el picor es intenso, hay que sospechar de otros aspectos como las pulgas, los piojos o las termitas de la sarna.

¿Cómo se trata la caspa de los cachorros?

Si su cachorro tiene caspa, los suplementos de ácidos grasos funcionan bien para suministrar los aceites necesarios para la capa de pelo. Los champús de avena acompañados de un enjuague hidratante ayudarán a mantener los aceites, limpiar la piel y eliminar la caspa.